domingo, 22 de julio de 2012

La suerte de mi vida, 270310.


                                                                                            Pienso que debería seguir dando las gracias por estar aquí y poder disfrutar de lo que no podría haber disfrutado si me hubiese ido al más allá.

Tenemos que luchar, de Aarón B.




Hay veces en las que no nos atrevemos a expresarnos por miedo. No hablo de casos sin importancia, sino cuando realmente están jugando con tu vida. Es un juego de azar; vivir o morir.

Algunos no hablaron por miedo a morir; mientras otros no tuvieron temor para hablar de los demás. Muchos de ellos no saben cómo aguantaron todo el tiempo que aguantaron, pues también tenían hijos, hermanos, padres o cualquier familiar a su cargo.

Nosotros, que en comparación vivimos como reyes, lloramos cada vez que vemos esas imágenes tan dolorosas de guerras como la de Bosnia y Herzegovina. Pero no pasamos ni lo mejor de lo que ellos pasan o han pasado, porque es un sufrimiento intolerable.

Creemos sufrir cuando nos hacemos daño. Pensamos que se nos cae el mundo encima cuando estamos dolidos por amor. Pero jamás podremos ni imaginar todo lo que ellos, humanos como nosotros, han tenido que pasar sin merecerlo.

©2012, Aarón Barreiro Moreno

(Foto extraída de el periódico El País)

sábado, 7 de julio de 2012

Disfrutemos, de Aarón B.


Tenemos que vivir la vida al máximo; pero no vale sólo con vivirla, debemos disfrutarla. Disfrutar todos los momentos, malos y buenos. Los buenos nos hacen sonreír, los malos nos hacen más fuertes. Disfruta cuando te expresas, no te expreses con miedo. Disfruta cuando llores, desahógate. Disfruta con la música, escuchándola o haciéndola. Si te das la vuelta en el camino, estás tú solo. Recuerda: naciste solo y morirás solo. A pesar de que nos rodeen muchísimas personas que valoramos y a las que queremos, como tu familia y amigos, debemos saber siempre quiénes somos nosotros mismos. Como nacimos, moriremos. Las personas cambian y maduran con el tiempo y con la experiencia, pero siempre seremos los mismos cristianos que tememos al león del circo romano. Por tanto, vive y sé feliz, como decían Timón y Pumba, dos amigos de mi infancia.

©2012, Aarón Barreiro Moreno.